La Dirección Nacional de Migraciones y la Dirección de Vigilancia de la Salud, advirtieron que en los controles migratorios se impedirá viajar a todas aquellas personas que no cuenten con el carnet de vacunación contra la fiebre amarilla, y a los que se hayan vacunado en menos de 10 días antes de viajar.
La alerta por fiebre amarilla es grave en el vecino país (Brasil), y en consecuencia, las autoridades del Ministerio de Salud y de Migraciones están tomando estrictas medidas de control, para evitar una epidemia de fiebre amarilla, que por las condiciones de alta infestación del mosquito Aedes aegypti en todo el territorio, la población estaría en riesgo de muerte.
En los 41 controles migratorios del país se reforzó la exigencia del carnet de vacunación contra la fiebre amarilla, y se subrayó que aunque se cuente con el carnet de vacunación pero este se haya expedido sin respetar los 10 días requeridos entre aplicación de la vacuna y las intenciones de los viajeros de salir del país, no se les permitirá la salida.
“Este es el momento en que las personas que tengan programados viajes en el mes de enero o febrero, a las zonas con alertas activas de fiebre amarilla, se apliquen la vacuna antiamarílica, porque de lo contrario no podrán salir del país. Teniendo en cuenta que la vacuna antiamarílica surte efecto a los 10 días de su aplicación, quienes se hayan vacunado pero no hayan cumplido los 10 días de aplicación de la vacuna no podrán viajar”, indicó el director de Migraciones, Alexis Penayo.
Agregó que los ciudadanos paraguayos y los extranjeros radicados en Paraguay que provengan de una zona de riesgo y no posean carnet de vacunación, serán derivados con el personal de salud para ser sometidos a un control sanitario por un periodo de 10 días, a partir de su ingreso.
Actualmente, casi todos los estados de Brasil (excepto dos) están con alerta y riesgo por fiebre amarilla, con reportes de fallecidos en cada uno de ellos.
“La fiebre amarilla es altamente mortal. Casi el 50% de la población infectada por este virus muere, y si llega a introducirse en el país con nuestros elevados índices de infestación larvaria del mosquito transmisor (Aedes aegypti), sería una epidemia letal para nuestra población”, indicó el Dr. Guillermo Sequera, director de Vigilancia de la Salud.