Desde el año pasado en el marco de la campaña “Heforshe” (ElPorElla) la Fundación Tesãi viene apoyando todo un movimiento solidario patrocinado por ONUMujeres, con el apoyo de la Itaipú Binacional.
El objetivo es involucrar a hombres y mujeres como defensores y agentes de cambio, generando conciencia sobre las desigualdades entre hombres y mujeres, a través de nuevos modelos de conducta que propicien un mundo igualitario.
“Es un lanzamiento interno en cada empresa, visitando instituciones, sector público y privado, academias y estamentos civiles. La Fundación Tesãi es una referencia, hay gente fantástica, buscamos aliar a los varones en la igualdad de género, desde la perspectiva de la masculinidad”, precisó la especialista de Naciones Unidas, Sede Paraguay, Lic. Jennifer Rodríguez.
Por otra parte, la licenciada Rosa Bergottini, gerente administrativa de la Fundación Tesãi, manifestó que por ciertos cánones y convencionalismos sociales al hombre se le está vedado expresar sus sentimientos y emociones, inclusive poniendo en riesgo muchas veces su salud, porque en nombre de la virilidad y para no dar una apariencia de debilidad se minimizan síntomas de enfermedades, no acuden a controles periódicos a modo de prevención en su salud, lo que representa mayores posibilidades de morir que las mujeres, refirió Bergottini.
“Exploramos qué tipo de impacto tiene la masculinidad y la formación social del hombre en su salud física, mental y sexual. Los obstáculos que afrontan los hombres a sus problemas médicos, la sociedad impone muchas limitaciones al hombre, hablamos de su vinculo con la salud”, indicó en otro momento la Lic. Bergottini.
ONUMujeres ha sido creada para atender esas dificultades, como entidad encargada de la protección y defensa de las mujeres, en base a la visión de igualdad de la carta de Naciones Unidas que hace hincapié en ejes estratégicos como la eliminación de la discriminación en contra de las mujeres y las niñas, el empoderamiento de la mujer y el logro de la igualdad entre las mujeres y los hombres, como socios y beneficiarios del desarrollo, los derechos humanos, las acciones humanitarias, la paz y la seguridad.
Las desigualdades entre los géneros están muy arraigadas en las sociedades. Las mujeres no tienen acceso a un trabajo decente y se enfrentan a una segregación ocupacional y a las diferencias en los salarios por su sexo. A veces se les niega el acceso a la educación básica y a los servicios de salud. Las mujeres de todas las regiones del mundo son victimas de violencia y de discriminación y están mal representadas en los procesos de toma de decisiones.
En julio de 2010, la Asamblea General de las Naciones Unidas creó ONUMujeres, la Entidad de la ONU para la igualdad de Género y el Empoderamiento de la Mujer. Al hacerlo, los Estados Miembros dieron un paso histórico en la aceleración de los objetivos de la Organización, según el boletín de prensa de Asesoría de Comunicación Social de la Fundación Tesãi.