Los empresarios y comerciantes esteños esperan que la tradicional feria de descuentos “Black Friday”, prevista para el próximo mes, ayude a mejorar el movimiento comercial en el Este del país, para contrarrestar los efectos negativos de la devaluación del real frente al dólar. Aducen que siempre los últimos meses del año suelen ser favorables para la actividad comercial, por lo que no pierden la esperanza de mejoría en las ventas con la realización de esta promoción, que atrae compradores extranjeros y compatriotas.
De acuerdo a la cotización, cada dólar equivale a 5,53 reales, lo que hace que el poder adquisitivo de los brasileños disminuya y opten por no venir a Ciudad del Este para realizar sus compras. Los comerciantes indicaron que hace más de una semana la moneda brasileña perdió valor ante la estadounidense, pues meses atrás estaban equilibrando los costos con una cotización accesible.
“Tenemos esperanza, hay movimiento después de la pandemia, estamos seguros que vendrán los clientes, habrá más gente que venga a comprar a Ciudad del Este y desde el otro mes vendrán también los argentinos cuando se liberen las fronteras. No será lo ideal, pero todos necesitamos de eso y esperamos que las autoridades hagan algo por la seguridad de los turistas”, dijo un trabajador del microcentro, vendedor de relojes en la avenida Carlos Antonio López.
Black Friday
El anuncio del Black Friday para el mes de noviembre genera expectativas positivas en el sector comercial y todos los trabajadores cifran sus esperanzas en que eso llame la atención de turistas, no sólo extranjeros, sino también de las ciudades del Alto Paraná y otros puntos del país, para reactivar la economía de la zona.
“La esperanza es lo último que se pierde, estamos esperando el repunte de las ventas, el cambio entre el real y el dólar es inestable y ahora no nos favorece, con eso es difícil vender. Todos sabemos que casi exclusivamente dependemos de los brasileños”, indicó una comerciante de una tienda de ropas en la avenida San Blas.
El economista Carlos Aponte refirió que esta fluctuación de la divisa brasileña con el dólar, siempre se ve afectado, no solo por factores externos sino internos del Brasil, como las constantes turbulencias políticas del gobierno de Jair Bolsonaro, que repercuten en el mercado de finanzas, casi siempre, no en forma positiva.
Los precios de las mercaderías en la capital del Alto Paraná están mayoritariamente en dólares y la cotización es un factor que tiene un impacto directo en la economía de la frontera. Ciudad del Este, depende casi exclusivamente del comercio y si esta situación no varía, puede afectar sensiblemente el nivel de ventas y los ingresos de los comerciantes.
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