A pesar de la decisión de Petropar de esperar hasta la primera quincena de junio para estudiar un aumento de los precios de los derivados del petróleo, los emblemas privados siguen firmes con la decisión de incrementar los actuales costos de los combustibles a fin de este mes.
Así lo confirmó Jorge Cáceres, gerente general de Copetrol, quien ratificó que los emblemas no tendrían tanto volumen de productos en sus depósitos como para aguantar cubrir todo el mercado hasta la quincena de junio, como lo haría Petropar.
“No estamos 100% seguros de que con el producto que hay en depósito podamos soportar hasta pasado fin de mes, pues todo dependerá de la venta que tengamos en esta semana”, explicó Cáceres.
Afirmó que si continúan con el nivel de ventas que están teniendo hasta ahora –que si bien disminuyó en un 15% a 20% de mayo de 2021 a mayo de 2022 después del último aumento–, tendrán que verse obligados a ajustar los precios ya a fin de mes.
Sobre el porcentaje de aumento en el precio, Cáceres no quiso arriesgar números, pero se especula que sería entre G. 500 a G. 1.000, según mencionaron desde diferentes gremios que aglutinan a los distribuidores y emblemas privados.
15 de junio
Denis Lichi, presidente de Petropar, había anunciado tras la reunión del Equipo Económico, que el emblema estatal no modificaría los precios de los combustibles hasta mediados del próximo mes, mensaje que fue recibido con beneplácito por los consumidores.
Lichi justificó esta decisión alegando que la petrolera cuenta aún con un stock importante en sus plantas de almacenaje, adquirido a menor costo que la cotización actual. No obstante, el titular de Petropar reconoció que existe preocupación por la fluctuación de los precios internacionales. También fue sincero al apuntar que si deciden comprar ahora una nueva partida de carburantes para la comercialización interna, el precio de adquisición a nivel internacional es superior al de la venta local al público en G. 1.300 el litro, en promedio.
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